En los
últimos 10 años, la FIL, a opinión del público joven, es decir estudiantes de
los últimos años de colegio y de la universidad, han coincidido en que la feria estos últimos años ha ido perdiendo la chispa literaria.
Según recuerdo, la feria era un espacio de libertad al que la gente acudía en busca de un buen libro, teatro, cultura en sí, la feria era un espacio cultural.
Según recuerdo, la feria era un espacio de libertad al que la gente acudía en busca de un buen libro, teatro, cultura en sí, la feria era un espacio cultural.
Ahora, lo
menos que la gente busca es ir a comprar un libro, va en
busca de paquetes turísticos, juguetes, películas, comida y hasta ropa. Pero…
¿Por qué la gente ya no compra tantos libros?
Porque la
feria se ha “comercializado”, la gente ya no puede concentrarse y dedicarse a
la búsqueda de un buen libro, está totalmente acosada y bombardeada de
información, de cosas que comerciantes venden, que por supuesto, es todo menos
libros.
Esto, según
yo, es nuestra responsabilidad, nunca falta el que compra ropa, juguetes o
paquetes turísticos. A raíz de esto, es también nuestra responsabilidad
revertir este fenómeno del “comprar cosas que no son el tema central de la
feria”.
¿Cómo será la
FIL este año? ¿Lograremos hacer un cambio?
( Por : Camila Cárdenas Bowles)
( Por : Camila Cárdenas Bowles)
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